El uso de insectos parasitoides para el control de plagas ofrece numerosos beneficios económicos y ambientales. Al reducir la dependencia de plaguicidas químicos, se disminuyen los costos asociados con la compra de estos productos y se evitan los daños al medio ambiente y a la salud humana. Además, los insectos parasitoides no atacan a otros organismos diferentes a sus objetivos, minimizando la afectación a otros seres vivos.

Otro de sus factores positivos es que tiende a ser autosustentable y permanente en el tiempo. Los parasitoides actúan por sí mismos, atacando a sus huéspedes y repitiendo su ciclo reproductivo-alimenticio de manera automática.

Asesoría y pasos para su implementación

Para emplear este sistema de control biológico de forma exitosa, es necesario seguir ciertos parámetros, como utilizar la cantidad adecuada de insectos parasitoides y llevar a cabo liberaciones regulares en los cultivos. Los productores pueden contar con la asesoría de los técnicos agroecológicos en Faros Agroecológicos, quienes brindan soporte en la selección del tipo de insecto parasitoide ideal para cada tipo de plantación y en la implementación del método.

Los pasos básicos para implementar el control biológico con insectos parasitoides incluyen:

• Evaluación de la plaga: Identificar la especie de plaga presente en el cultivo y su nivel de infestación.
• Selección del parasitoide adecuado: Elegir la especie de parasitoide que sea más efectiva contra la plaga específica.
• Proveer recursos alimenticios a los insectos parasitoides: Establecer recursos florales que ofrezcan néctar, polen, miel y melaza el cual sirva de alimento a las fases adultas. Corredores biológicos, áreas de compensación ecológica, Asociaciónes de cultivo, franjas florales.
• Liberación de parasitoides: Realizar liberaciones de parasitoides en los momentos y cantidades adecuadas para maximizar su efectividad.
• Monitoreo y seguimiento: Observar regularmente los cultivos para evaluar el impacto de los parasitoides y ajustar las estrategias según sea necesario.

Beneficios y Resultados de la Investigación

La investigación realizada en Veracruz destaca la importancia de los insectos parasitoides, especialmente las avispas, en el control del gusano cogollero. Se identificaron ocho especies de parasitoides, siendo Chelonus insularis la más efectiva, con un nivel de parasitismo del 31.7%. Estos insectos ofrecen una solución natural y eficaz para reducir las plagas sin recurrir a plaguicidas químicos.

El impacto de esta investigación en las prácticas agrícolas de Acayucan, Hueyapan de Ocampo y Soteapan ha sido muy positivo. Al promover el uso de insectos parasitoides, los agricultores pueden reducir el uso de plaguicidas químicos, mejorar la salud del suelo y aumentar los rendimientos de los cultivos. Además, con el apoyo y asesoría de los técnicos agroecológicos de Faros Agroecológicos, los productores pueden implementar estas prácticas de manera sostenible y eficiente, haciendo que la agricultura sea más ecológica y rentable, y fortaleciendo la economía local.

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